
El pasado 20 de mayo se publicó en la revista European Journal of Neurology un artículo en el que los doctores Wolfgang J Schnedl y Robert Queissner expusieron que existe aparentemente una mayor relación entre la causa de las migrañas y la histamina que con el etanol presentes en las bebidas alcohólicas.
En la carta al editor que han publicado ambos doctores, reflexionan sobre otra reciente publicación de Onderwater et al, de la misma revista, en la que se pretende mostrar mediante estudios epidemiológicos una relación causal entre el etanol de las bebidas alcohólicas y el desarrollo de migrañas en la gente que las consume.
Sin embargo, ambos doctores sostienen que no se ha identificado ningún mecanismo patofisiológico específico que correlacione la ingesta de alcohol con las migrañas y los dolores de cabeza (siendo el vino tinto la bebida alcohólica que más se ha relacionado en la población del estudio de Onderwater et al con la migraña).
Argumentan, en contraposición, que de lo que existe mayor evidencia hasta el momento como causa de las migrañas y los dolores de cabeza son el déficit de la enzima diamino oxidasa (DAO) (alteración en la principal ruta de metabolización de la histamina alimentaria, y que además se puede presentar por una alteración genética heredable) y los efectos que generan la histamina exógena y otras aminas biógenas (como la tiramina, feniletilamina, putrescina, cadaverina, espermidina, serotonina, triptamina, agmatina) cuando se acumulan en plasma tras ser ingeridas.
Los resultados de medición de estas aminas en bebidas alcohólicas muestran que se han cuantificado mayores concentraciones en el vino tinto (con concentraciones >2.200 μg/L), siendo el doble de la concentración que se puede encontrar en el vino blanco ( ~900 μg/L), y mucho mayor aún que en destilados como el vozka. Esta diferencia de concentración también se ha visto relacionada con la menor incidencia de migraña en estudios en los que la población consumía vozka que en los que la población consumía vino tinto.
En cuanto al mecanismo patofisiológico de la causa de las migrañas por déficit de DAO, ciertos genotipos de la enzima DAO y sus variantes alélicas (todos ellos implicados en un déficit de actividad de la enzima) han mostrado asociación con un mayor riesgo de padecer migraña. Por otra parte, estudios recientes consistentes en ensayos doble ciegos aleatorizados en los que una población de pacientes con migraña eran tratados con suplementos de DAO, han mostrado una reducción en el número, frecuencia e intensidad de las migrañas. Unidos a estos resultados, en otros estudios de suplementación con DAO sobre población paciente con intolerancia a la histamina (HIT), se ha mostrado una reducción de los dolores de cabeza y el resto de síntomas relacionados con esta patología.
Al margen del interés que pueda suscitar y de los datos y estudios mostrados acerca de personas afectadas con diagnóstico de déficit de DAO e intolerancia a la histamina, esta carta al editor no menciona el papel inhibidor del etanol sobre la actividad de la diamino oxidasa, lo cual explica el síndrome de la resaca tras la ingesta aguda de alcohol en personas sin diagnóstico de HIT ni déficit de DAO.
El doctor Wolfgang J Schnedl es profesor de medicina interna y doctor en el General Internal Medicine Practice Theodor Könerstrasse (Austria), y el doctor Robert Queissner es profesor en el departamento de psiquiatría y medicina psicoterapéutica de la Medical University of Graz (Austria).